lunes, 28 de enero de 2008

Re encuentro con el grupo.

El viernes nos juntamos para leer “El oso de la luna creciente” (del libro “Mujeres que corren con los lobos”), tengo tantas ganas de verlas, extraño nuestros encuentros semanales, el compartir las vivencias de cada una sintiendo que también son mías, la alegría por el logro de alguna, el dolor por la tristeza o frustración de otra, las risas que nunca faltan. En fin todo eso que ponemos en pos de recorrer este camino de conocernos como mujeres y ser nosotras mismas en nuestros vínculos.

Llegó el momento

Por fin hoy me decidí a escribir, pasa que desde hace mucho tiempo tengo esta necesidad y siempre la postergaba.
Claro que esta postergación me llevó a solucionar postergaciones anteriores, acomodé cajones, placard, organicé archivos, liberé mucha energía estancada en forma de ropa que no será usada, en papeles amontonados que no serán leídos, en cartuchos de impresora que no serán recargados, etc., etc.
Recuerdo que hace más de un año comenté en un grupo de mujeres, que sentía una especie de empacho por todo lo acumulado durante varios años, todo había sido como auto conocimiento pero mi necesidad era hacer algo más con todo eso, que no quedara sólo en mi ombligo.
Al tiempo escuché sobre los bloggs y toda entusiasta comencé a averiguar, porque pensaba que ESE era el camino, a decir verdad, la informática no es uno de mis dones, la fantasía es que si aprieto la tecla equivocada saldrá una especie de monstruo que comerá (tipo pacman) todo lo que contiene la compu....
Vero, siempre me decía “no pasa nada Lili, es fácil”, pero vieron como son estas cosas, todo iba bien hasta que salía el cartel “Abrir un Blog”, mi cabeza decía “hoy es el día” pero mi mano amotinada con el mouse no obedecía e inexorablemente terminaba clickiando “salir o cerrar o atrás”. Claro que sabía que todo era resistencia a lo nuevo.... el viernes Vero me manda un mail con el título “preparate para materializar tu sueño”, mis tripas se estremecieron porque sabían que se acercaba la muerte del mito. Ella decía “escribí el contenido que TE enseño a subirlo, vas a ver que es fácil.....”. (Verán que muchas veces uso el humor para descomprimir sensaciones o emociones porque creo que es una medicina que alivia.)
Comencé a pensar cuantas veces nos asustamos ante lo nuevo y no se trata de edad, conocimiento, inteligencia, tiempo, etc., etc. Que poco sabemos acompañarnos en ese susto, miedo, parálisis ¿no?.A mi me resultó muy bueno conocer hasta donde podía llegar, ponerle nombre a lo que me pasaba y darme cuenta que cuento con personas (GRACIAS VERO) que me pueden ayudar.